Los últimos desfiles de las principales semanas de la moda tuvieron un claro protagonista: las pieles, en su mayoría sintéticas. Desde tapados imponentes hasta detalles en accesorios, este material dominó las colecciones y fue el favorito de muchas celebridades en el front row.
Si algo aprendimos sobre la moda es que, como dice el famoso dicho, “todo vuelve”. Sin embargo, más allá de la ciclicidad de las tendencias, es interesante analizar cómo y por qué ciertas prendas resurgen en determinados momentos. El regreso del estilo Y2K y la popularidad de la estética de los años 90 son prueba de ello. Pero en el caso de las pieles, hay una historia mucho más profunda detrás de su caída y su reciente resurgimiento.

Del auge al rechazo: La caída del uso de pieles
Durante décadas, la industria de la moda utilizó pieles naturales como símbolo de lujo y estatus. Sin embargo, a medida que el movimiento por los derechos de los animales ganó fuerza, las pieles comenzaron a generar un fuerte rechazo social. Organizaciones como PETA, a través de campañas agresivas, protestas en desfiles y denuncias públicas, lograron instalar un cambio de mentalidad en la sociedad y en las marcas.
Este cambio fue gradual pero imparable:
- Calvin Klein prohibió el uso de pieles en 1994.
- Ralph Lauren hizo lo mismo en 2006.
- En 2017, Gucci anunció que eliminaría la piel real de sus colecciones, marcando un punto de inflexión en la industria.
- Luego, marcas como Michael Kors, Burberry, Prada, Versace, Tom Ford y Marc Jacobs siguieron su ejemplo.
- Para 2021, Kering (dueña de Balenciaga, Saint Laurent y McQueen) impuso una prohibición total del uso de piel en todas sus marcas.
- Grandes minoristas como Macy’s, Bloomingdale’s y Neiman Marcus también dejaron de vender pieles nuevas.
En este contexto, usar piel real se convirtió en un tabú social, especialmente en Europa y Estados Unidos, donde cada vez más ciudades y países comenzaron a prohibir su comercialización.
Sin embargo, en la moda nada desaparece para siempre.

El regreso de las pieles: entre lo vintage y las nuevas narrativas
En los últimos años, las pieles han comenzado a reaparecer, pero con un nuevo enfoque. En lugar de pieles nuevas, la industria encontró una forma de reintroducirlas bajo el concepto de moda vintage y circular.
Muchas celebridades fueron vistas usando pieles heredadas o de segunda mano, argumentando que esta elección es más sostenible que comprar nuevas prendas de materiales sintéticos. Algunos ejemplos recientes incluyen:
- Rihanna, quien fue fotografiada con un abrigo de visón vintage de John Galliano.
- Kendall Jenner, luciendo un abrigo vintage de zorro de Balenciaga de 2011.
- Kylie Jenner y Hailey Bieber, usando distintos modelos de piel en Aspen.
Este resurgimiento se consolidó en la última Semana de la Moda, donde firmas como Dolce & Gabbana, Fendi y Prada incorporaron pieles (reales y sintéticas) en sus colecciones, reforzando su presencia como un elemento de lujo y sofisticación.
Además, plataformas como TikTok han impulsado esta tendencia con estéticas virales como “Mob Wife”, que celebra un estilo decadente con abrigos de piel, cuero y estampados de leopardo, así como con otras corrientes como “Old Money” y “Rich Girls”, que evocan símbolos de riqueza clásica.

¿Qué significa esta tendencia para el futuro de la moda?
El resurgimiento de las pieles plantea varias interrogantes sobre el futuro de la moda:
- Ética vs. estética: Aunque muchas marcas optan por pieles sintéticas, aún existe debate sobre su impacto ambiental y la ética detrás del uso de pieles vintage.
- Moda circular: La revalorización de piezas heredadas refuerza la importancia del consumo consciente y la reutilización de prendas icónicas.
- Cambio cultural: Mientras en algunos sectores las pieles vuelven a ser símbolo de estatus, en otros sigue habiendo una fuerte oposición al material.
La industria de la moda sigue en constante evolución y, como siempre, el consumidor tiene la última palabra. ¿Será este un regreso definitivo o solo una tendencia pasajera?

Deja una respuesta